Asegúrese que la red eléctrica del edificio esté en buenas condiciones.  No hacerlo supondría un grave peligro de incendio. No conecte varios aparatos en un solo enchufe múltiple, no utilice aparatos de ningún tipo en mal estado (estufas, cocinas, neveras, etc.) y no los manipule ni los repare si no sabe hacerlo correctamente.

  • Contar con la ventilación adecuada. Asegúrese de que las habitaciones en las que hay cocinas, calentadores o estufas de gas dispongan de una ventilación que comunique con el exterior, ya que en caso contrario hay peligro de intoxicación o de explosión si se produce una fuga de gas.

 

  • Las estufas pueden originar un incendio. Manténgalas alejadas (como mínimo un metro) de otros objetos que puedan quemarse, como por ejemplo sofás, cortinas, ropa puesta a secar, etc.

 

  • Señalización de las vías de evacuación y alumbrado de emergencia. En caso de incendio, es de vital importancia que las vías de evacuación y salidas de emergencia se encuentren perfectamente señalizadas y libres de obstáculos que impidan la libre salida del edificio en caso de incendio.

 

  • Instalación de extintores en cada planta del edificio. Es de vital importancia que cada piso de su edificio cuente con un extintor  y  que estos cuenten con el correspondiente mantenimiento de extintores manuales, para que su edificio se encuentre preparado para cualquier eventualidad.

 

  • Limpieza en el Consorcio de Propietarios, especialmente en garajes y sótanos.  A la hora de prevenir incendios en un consorcio de propietarios, es fundamental el orden y la limpieza. Acumular basura, cartones, muebles, líquidos inflamables (aceites, pintura etc.) en garajes y sótanos supone un alto riesgo de incendio. También es muy importante que los garajes estén ventilados y prohibir fumar dentro de ellos, pues muchos fuegos se producen por cigarrillos mal apagados.

 

  • Revisión de las Instalaciones Fijas contra Incendios. De nada sirven las Instalaciones Fijas Contra Incendio (Alarma de Incendios, Hidrantes, extintores, etc)  si no se encuentran en perfecto estado. Deberán realizarse las revisiones periódicas establecidas por ley por una Empresa Mantenedora Autorizada con el fin de garantizar su buen funcionamiento.